domingo, 1 de marzo de 2015

Dia IV: Quimio y la reflexión


Cuarto día de quimio y algunos síntomas van apareciendo pero nada importante. Este segundo domingo de Cuaresma invita a levantar la vista y ver a Jesús que está siempre a nuestro lado y nos da consuelo.

Pero la historia del Monte Tabor tiene un precedente y tiene un fin. No se entiende por sí solo.

- Monte del Sacrificio: Donde Abraham estuvo "a punto" de ofrecer a su propio hijo -Isaac- en sacrificio. Extraordinaria la actitud de Abraham -esperar contra toda esperanza- y la respuesta de Dios. ¿Cuántas veces nos cuesta dar algo al Señor cuando en realidad lo que nos devolverá será lleno de bendiciones?

- Monte de la Transfiguración: La semana previa les había anunciado su Pasión y ahora, el Señor, les muestra parte de su Gloria. Son las pequeñas "gotas de miel", consuelos que el mismo otorga a los suyos, para confortarlos, para animarlos a no desfallecer en la lucha. ¡Qué bien nos haría pensar en el premio -el cielo- que el Señor nos ha prometido!

- Monte del Calvario-de la Resurrección: La Transfiguración solo se entiende con la Cruz que a su vez tiene su culmen en la Resurrección. Nuestra salvación solo se alcanza a través del camino del Sacrificio, de la Cruz, de la Resurrección. Jesús mismo ha recorrido ese camino.

Que bien caen hoy las palabras del Santo Padre en el Angelus:
"El camino de Jesús siempre lleva a la felicidad. ¡Jesús no engaña! Si Él ha prometido la felicidad, la dará".

No hay comentarios:

Publicar un comentario